Irán lanza misiles a Israel mientras terroristas golpean Tel Aviv: “Este ataque será respondido”
Sirenas, caos y tensión en el corazón de Tel Aviv. En apenas unos minutos un grupo de terroristas perpetra un atentado en el corazón de la ciudad mientras que Irán lanza sus misiles contra Israel. Los ciudadanos se refugian en sus refugios mientras la crisis en Oriente Medio apunta a una escalada bélica. “Este ataque será respondido y tendrá todo tipo de implicaciones”, sostienen fuentes oficiales del Ejército israelí en conversación con Vozpópuli.
Nos ubicamos en las inmediaciones del hotel Ruth Daniel, en Yafo, núcleo estratégico de Tel Aviv. Son en torno a las seis de la tarde cuando un grupo de personas corre desde la calle Jerusalén. No tardan en llegar policía, ambulancias y soldados. “Ha habido un ataque”, señalan los testigos.
Sin aún saber todos los detalles, hablan del atentado perpetrado por varios terroristas que viajan a bordo de un tren y, al llegar a la estación y abrirse las puertas, empuñan sus armas y disparan contra los ciudadanos allí concentrados. Es hora punta.
Las indicaciones de las autoridades son claras. Es importante buscar un refugio a la mayor brevedad posible. Los terroristas aún siguen en libertad. La amenaza sigue vigente.
Unos lo hacen en bares, otros lo hacen en establecimientos hosteleros o en cualquier tienda abierta.
La información es confusa. Los primeros informes hablan de muertos. ¿Cuántos? Finalmente serán seis y al menos una decena de heridos; varios de ellos en estado crítico.
Del ataque a los búnkeres
Pero no hay margen para las especulaciones. Inmediatamente suenan las sirenas. Los reunidos en el hotel buscan seguridad en los búnkeres. Un grupo de soldados llama a los allí reunidos. Son cinco, uniformados y de corta edad. Dentro del búnker no dejan de sonar las alarmas de los teléfonos móviles: “Alerta de emergencia: extrema”, notifican los terminales.
Los militares aseveran que el protocolo es el habitual, pero enseguida llaman a sus familiares para tranquilizarles. El ataque, realmente, no les sorprende. Irán había anunciado esa misma tarde que atacaría a Israel tras su incursión terrestre sobre el Líbano.
“Es un ataque sin precedentes contra Israel, Irán está empujando a Medio Oriente a una escalada de violencia”, sostiene Roni Kaplan, capitán y portavoz del Ejército Israelí. “Actuaremos en el tiempo y momento que creamos conveniente. No cabe la menor duda de que este ataque de Irán será respondido y tendrá todo tipo de implicaciones”.
Porque la incertidumbre que se sostiene en Tel Aviv es la de toda la región. ¿Hasta dónde llegará la ofensiva militar de Israel sobre el Líbano? El Gobierno sostiene que hasta que se den las condiciones necesarias para que los 66.000 evacuados junto a la frontera norte puedan regresar a sus casas, sin especificar objetivos militares concretos.
¿Cuál será la reacción de Irán? ¿Y la de Israel? ¿Tendrá Hezbolá la capacidad ofensiva para atacar al país hebreo tras la muerte de su líder, Hasan Nasrala, y los recientes ataques contra sus posiciones?
Un año de guerra
Se cumple un año desde los ataques terroristas de Hamás perpetrados el pasado 7 de octubre y el frágil equilibrio de Oriente Medio amenaza con estallar por los aires en una crisis que se extiende por toda la región. Israel mantiene su ofensiva militar sobre la Franja de Gaza, a pesar de las críticas de la comunidad internacional, y abre una nueva brecha en su frontera norte, en el Líbano.
Hasta el momento no hay una previsión sobre el cese de las hostilidades en la región. Israel mantiene el foco en la situación de los 101 rehenes que aún permanecen en manos de Hamás; sobre el norte, no hay informes específicos sobre el alcance de la ofensiva militar. La ONU, por su parte, denuncia cualquier “violación” de la frontera entre Líbano e Israel, en clara referencia a la ofensiva militar del país hebreo.
Tel Aviv se sacude en la incertidumbre de los últimos acontecimientos, tras el ataque terrorista múltiple en una de las arterias principales de la ciudad y el lanzamiento de misiles procedentes de Irán. “Responderemos”, concluyen desde el Ejército israelí.