Este 3 de septiembre en Tuchín, integrantes del programa de Enfermedades Transmitidas por Vectores y Zoonosis de la Secretaría de Desarrollo de la Salud de la Gobernación de Córdoba, con el acompañamiento de la Dirección Local de Salud de Tuchín, realizaron un muestreo sanguíneo a perros con el fin de diagnosticar Leishmaniasis visceral en la vereda Las Lagunas, el pasado 29 de agosto.
Gobernación busca identificar casos de leishmaniasis
El perro el principal reservorio de la Leishmaniasis, en este caso, la visceral, razón por la cual las acciones se han concentrado en este animal de compañía. Durante la jornada también se educó, con enfoque diferencial, sobre transmisión y sintomatología de esta enfermedad infecciosa causada por parásitos del género Leishmania, los cuales son transmitidos a los humanos y animales a través de la picadura de mosquitos flebótomos (que chupan sangre) infectados, también conocidos como “moscas de la arena”, “torito”, “plumilla” o “carachai”.
Otras poblaciones donde también se ha hecho muestreo en el departamento han sido las veredas El Carreto y El Contento, pertenecientes al municipio de San Andrés de Sotavento.
De acuerdo con la información entregada por la autoridad sanitaria, existen tres tipos de leishmaniasis, cuyos síntomas varían según la forma de la enfermedad: La Leishmaniasis cutánea, que es la forma más común, se manifiesta con llagas en la piel que pueden convertirse en úlceras. La Leishmaniasis mucocutánea que afecta las mucosas de la nariz, boca y garganta, causando úlceras destructivas y la Leishmaniasis visceral, también conocida como “kala-azar”, afecta órganos internos como el hígado y el bazo, y se presenta con fiebre, pérdida de peso, anemia y agrandamiento del hígado y el bazo.
Esta enfermedad se transmite a través de la picadura de flebótomos hembra infectados que adquieren el parásito al picar a un animal o humano infectado.