“Apenas inicia la gran era del deporte del departamento de Córdoba, esta administración será recordada como la Gobernación de los deportistas y paradeportistas”, con estas palabras inició su intervención el gobernador Erasmo Zuleta Bechara, en el marco de la inauguración de los IV Juegos Departamentales y Paradepartamentales.
Las justas deportivas más importantes del departamento se realizan este año en honor al futbolista tierraltense, Miguel Ángel Borja, y se contará con la participación de cerca de 7 mil deportistas, procedentes de los 30 municipios del departamento.
“La lista de los deportistas de Córdoba es interminable, tenemos grandes talentos en nuestro departamento y hoy todos los cordobeses nos sentimos muy orgullosos de todos ustedes queridos deportistas. Estos juegos son en honor a Miguel Ángel Borja, un joven de Tierralta, del Alto Sinú, una zona que ha sido víctima de la violencia, y Miguel Ángel es ejemplo claro de lo que son los deportistas de Colombia y de Córdoba, que, a pesar de todas adversidades, la violencia podrá causarnos mucho dolor, pero nunca nos podrá arrebatar nuestros sueños, esos son los deportistas de Córdoba y de todo”, dijo.
Bajo un cielo brillante y con el majestuoso río Sinú como testigo, el gobernador de Córdoba, Erasmo Zuleta Bechara, ratificó su compromiso con los deportistas y con el deporte en general, buscando dejar una huella imborrable del departamento tanto a nivel nacional como internacional.
En su discurso, ante centenares de deportistas y asistentes cargado de emoción y orgullo, afirmó: “Que lo sepa Colombia y todo el mundo, que con nuestro deporte haremos historia. Este país es un país de regiones, una nación construida sobre la diversidad de sus paisajes, su gente y su cultura. Sin embargo, los mismos colombianos desconocen la riqueza de su propio territorio. Somos ricos, tenemos un potencial enorme, pero muchas veces vivimos a espaldas de nuestra riqueza, de nuestros ríos. Este evento busca que Colombia y el mundo reconozcan el tesoro que es Córdoba, que aplaudan su belleza y su fortaleza”.
La ceremonia no solo fue una celebración deportiva, sino un llamado a mirar hacia el interior de nuestras tierras, a valorar y enaltecer lo que nos define como cordobeses. La llama olímpica, en forma de flor de bonche, le dio identidad a la cuarta versión de los Juegos Nacionales y Paranacionales, en la que participan 7.000 deportistas de cada uno de los 30 municipios, en 49 disciplinas competitivas.
“Este evento aquí en Lorica tiene un significado muy especial para mí. Esta es la tierra de mis ancestros. Aquí, en estas murallas que ustedes ven, llegaron mis bisabuelos. Aquí en Lorica vivió mi abuelo, un hombre que llegó ligero de equipaje, pero que dejó un gran legado a todo un país, gestor de la educación en nuestro departamento y la región, el hombre que me inspira y que, en su historia de vida, deja claro que cuando hay un propósito definido, cuando hay persistencia y cuando hay disciplina, los sueños sí se conquistan”, sostuvo.
Zuleta recordó a grandes figuras de la región, como Zapata Olivella, David Sánchez Juliao y Marcial Alegría, quienes, con su esfuerzo, transformaron la vida de un departamento entero.
“Yo, como ustedes, queridos deportistas, también he perseguido muchos sueños. Estar hoy aquí, frente a ustedes, como su gobernador, es uno de esos sueños cumplidos. Y hoy, que Dios y la vida me dan la oportunidad de servirles, seré el instrumento para que ustedes desarrollen sus habilidades y se conviertan en los mejores deportistas del país”, afirmó, visiblemente emocionado, impulsado por el aplauso multitudinario.
Hace apenas unos días, Córdoba recibió la noticia de que será sede, junto con Sucre, de los Juegos Nacionales de 2027, un hito histórico que el gobernador describió como un logro monumental.
“Nos vieron pequeños cuando nos postulamos, pero como bien dice nuestro lema, ‘Córdoba es tierra de juglares’, y hoy somos la sede de los Juegos Nacionales. No solo nacimos para participar; vamos con todas nuestras fuerzas por esos juegos en 2027. Este tipo de noticias nos permite visibilizar y desarrollar nuestro potencial, contra todo pronóstico”, concluyó Zuleta.