Desde el Puente de Boyacá, símbolo patrio, el ministro de la Defensa, Diego Molano Aponte, advirtió sobre información –que manejan los organismos de seguridad– que da cuenta que mañana 7 de agosto se tendrían planes para atacar este lugar y el monumento del Pantano de Vargas.
El 7 de agosto se conmemora la Batalla de Boyacá, con la que terminó la jornada de independencia de 1819, y es además el día del Ejército Nacional.
Frente al riesgo, el ministro anunció el incremento del pie de fuerza en los lugares mencionados y advirtió «que no se permitirán desmanes ni actos vandálicos», siempre respetando el derecho a la protesta.
EL TIEMPO tuvo acceso a un informe de inteligencia que detalla la información sobre los supuestos planes de algunos sectores de la llamada primera línea –que desde Bogotá– buscarían desplazarse al Puente de Boyacá.
En el documento se destaca que la información recolectada viene de fuentes humanas, personas que no están de acuerdo con las acciones violentas que advirtieron –el 22 de julio– que «alias la Flaca, quien se desempeñaría como coordinadora de la denominada ‘primera línea Suba’, planteó una movilización el 7 de agosto hacia el Puente de Boyacá», se lee en el informe.
A esto se suma que el 29 de julio se estableció que otro grupo de la autodenominada primera línea de Bogotá se desplazaría a Tunja «el 3AG (3 de agosto), con el fin de participar en las actividades programadas para el 7AG (7 de agosto) tentativamente en el Puente de Boyacá», dice el documento.
Estas informaciones prendieron las alarmas de las autoridades, ya que el 3 de agosto se corroboró que hubo una reunión de la primera línea en un colegio ubicado en Bosa, en la que «varios delegados de este movimiento ratificaron la necesidad de movilizarse al Puente de Boyacá, y hacer presencia en el lugar» para generar un golpe de opinión.
La idea, de acuerdo con el informe, fue bien recibida por integrantes de algunas de las primeras líneas en Boyacá, que avalaron la iniciativa y la apoyaron con el anuncio de «acampar en el Puente de Boyacá entre el 7 de agosto y el 8 de agosto».
En el informe de inteligencia se afirma que los líderes de la iniciativa realizaron un «balance sobre las posibilidades del desplazamiento», ya que reconocen «la baja recolección de recursos económicos a través de plataformas virtuales, la falta de recursos y financiamientos».
De igual forma, son conscientes de que en el camino habrá puestos de control y pueden «ser capturados, porque conocen de los procesos judiciales que se
adelantan actualmente contra algunos de los integrantes y líderes de la llamada primera línea».
Y aunque, según las autoridades, al darse a conocer por parte del ministro los planes de estos grupos, se estaría evaluando no desplazarse hacia estos monumentos, se mantiene la alerta y la presencia de la Fuerza Pública.
Fuente: El Tiempo