En medio de múltiples manifestaciones llegó el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, a Inglaterra para reunirse con la Reina y con la Primera Ministra de ese país.
Uno de los hechos curiosos de la jornada de hoy fue la foto que compartió en Twitter la jefe de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, en la que sale Trump sentado en la silla de Winston Churchill y posando de lado, mostrando de cierta forma el orgullo que le producía estar allí.
Es de público conocimiento la gran admiración del primer mandatario norteamericano por el líder inglés, que enfrentó a la Alemania Nazi durante la segunda guerra mundial y que se caracterizó por sus contundentes pronunciamientos en contra del socialismo y en pro del capitalismo.