
A Sami Spath, en el escándalo de corrupción conocido como “cartel de la hemofilia” lo identificaban como hombre de las tulas.
Según las evidencias recaudadas, amigo, socio y compañero del ex gobernador de Córdoba, Alejandro Lyons.
En criterio de los investigadores Spath se encargó de llevar los sobornos de los contratistas a los funcionarios públicos, entre el ellos Lyons.
El tránsito de dadivas de acuerdo con los testigos se hizo en tulas repletas de dinero.
La Fiscalía lo citó a imputación de cargos y él aceptó los delitos de peculado por favorecimiento de terceros y concierto para delinquir.
Las ganancias de las irregularidades en la celebración de acuerdos entre la Gobernación y las IPS que se prestaron para saquear los recursos del departamento se repartieron entre funcionarios públicos y los contratistas, parte de ese dinero también se invirtió en el llamado “cartel de la toga”.
“La Fiscalía considera que Spath, amigo personal del ex gobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, habría servido de enlace entre los funcionarios y contratistas que, supuestamente, se beneficiaron con el desvío de los dineros públicos”.La aceptación de cargos además de traerle beneficios judiciales, acelera su proceso y le permite conocer en poco tiempo su condena.
Fuente: caracol.com.co